En un artículo anterior hablábamos de las computadoras y como estas fueron creadas a nuestra imagen y semejanza. Parece de ciencia ficcion pero no lo es.
Conceptos que hoy el común de la gente por lo menos ha escuchado, más allá que tenga o no conocimiento del tema, solo 20 años atrás no se hubieran podido hablar.
Tomemos por ejemplo el término ‘inteligencia artificial’. Hoy día la mayoría de las personas a oído hablar de el, pero no es nada nuevo. Este término se utilizó por primera vez en el año 1956 en la Conferencia de Dartmouth por el informático John McCarthy.
El termino se refería a un dispositivo que pudiera operar en forma autónoma con cierto grado de autodeterminación.
La capacidad de procesamiento de este dispositivo estaba condicionada en su momento por la velocidad en su procesamiento, como así también por la energía que consumía. A cuanto mas procesamiento, mayor recurso energético necesario.
Es así que las primeras computadoras estaban instaladas en grandes espacios bien aireados (por el calor que generaban) y con planta energética dedicada al aparato.
Hoy día nuestros teléfonos inteligentes tienen millones de capacidades superiores a las primeras computadas e incluyen componentes de inteligencia artificial.
Si bien la computadora fue creada a imagen y semejanza del hombre, existe una diferencia infranqueable entre estos, la cual es el poder de la mente humana, y el desarrollo de la conciencia.
En películas y series se muestra como los robots con inteligencia artificial pasan a controlar al ser humano y al mundo, pero hagámonos la siguiente pregunta:
Para los que creen en dios y fuimos creados por él, ¿podría el ser humano llegar a ser superior a su creador?
Para los que no creen en dios y creen que evolucionamos después de millones y millones de años desde una ameba a lo que somos hoy, ¿podría nuestra creación (la computadora) superarnos de un día para el otro?
En esta parte es donde la conciencia humana toma preponderancia. La conciencia no es nuestro cerebro, es un componente etérico el cual utiliza nuestro cuerpo y por ende nuestro centro de procesamiento llamado cerebro, para funcionar. Funciona en este plano cuando nuestro cuerpo tiene ‘energía’. Una vez que la energía se agota en este plano, comúnmente lo conocemos como muerte, la conciencia pasa a otro plano energético, no se pierde.
Para aquellos que creen en la reencarnación, esa mente pasa a un estado intermedio hasta que vuelve a reencarnar. Para aquellos que en su creencia hablan de estar en otro lugar por la eternidad, es precisamente la mente la que se mueve desde este plano al siguiente.
Ahora vale la pregunta, ¿a donde va la computadora y la inteligencia artificial cuando se apaga el sistema? La respuesta es obvia, a ningún lado, no tiene mente, no tiene conciencia, solo tiene cerebro.
En todos los artículos hablamos de desarrollar y elevar nuestra conciencia, ¿se comprende ahora por qué?
Porque más allá de tus creencias, cuanto más alto sea tu nivel de conciencia cuando dejes este plano, mejor será tu lugar a donde vayas. Ya sea por la eternidad o para regresar a este plano.
En un artículo anterior hablábamos de que la astrología solo servía para los que habían nacido y estaban en el plano de la tierra, no servía ni para los astronautas estando en la luna, marte o cualquier otro lugar.
Nuestro cuerpo esta regido por los ciclos de la luna, y los demás planetas del sistema solar. La energía de la luna y demás que nos llega actúa sobre nuestro organismo de determinada manera. Si estamos en la luna esta relación cambiaria completamente, al igual que si estuviéramos en marte o en algún lugar sin gravedad.
Los astronautas que están en la estación espacial pierden masa ósea y tienen meses de recuperación para superar la osteoporosis que les causa la larga estadía en el espacio. No hay duda de que estamos diseñados para estar solo en la tierra.
Como queremos ir al espacio, y conocemos bien nuestras limitaciones físicas, entonces estamos desarrollando un híbrido entre el ser humano y la inteligencia artificial. Esto se ve reflejado con el proyecto Neuralink de Elon Musk y otros, al igual que el desarrollo de prótesis inteligentes que interactúan directamente con nuestro cerebro. Vale decir, lograr algo de humano, y bastante de robot en una sola pieza. De esa forma se superarían las limitaciones físicas con las que contamos para salir de la tierra.
Mas allá de los avances científicos, no tenemos que perder de vista nuestro desarrollo de conciencia, que es lo que nos diferencia del resto.
En cuanto a lo que a la astrología le atañe, con todos estos cambios si se materializan, habría que desarrollar algo nuevo. La astrología no fue creada ni para los híbridos ni para ir a otro lugar fuera de la tierra.
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https://es.wikipedia.org/wiki/Inteligencia_artificial
https://emotionsmind.com/blog/cuerpo-eterico