Solo se trata de vivir…bien

Solo se trata de vivir…bien

¿Si alguien te preguntara que te podría hacer feliz? ¿Qué contestarías?

La respuesta podría cubrir una amplia gama de posibilidades, las cuales pueden incluir temas como el dinero, la pareja, la familia, un nuevo trabajo, una nueva casa, un nuevo auto, la salud, etc.

Solo a modo de ejemplo, la respuesta es quiero más dinero.

Digamos que sucede algo y llega el dinero en la cantidad que se pidió, eso por supuesto te va a generar un sentimiento de ‘felicidad’.

Solo por curiosidad, ¿cuánto durará ese sentimiento de felicidad? ¿Que produjo esa sensación que la podemos llamar de alegría o felicidad?

Algo para tener en cuenta es que ese sentimiento no va a durar indefinidamente.

Pero que hace que ese sentimiento se diluya en el tiempo, y que justificado o no, salgamos a la búsqueda de la próxima cosa que nos traiga felicidad.

Pareciera que siempre estamos en la búsqueda de algo externo que no tenemos, que nos traiga esa alegría, o esa felicidad, y de la cual estamos en la constante búsqueda.

La astrología nos enseña que todo es movimiento, y que ese movimiento no es lineal, sino circular. Todos vemos a nuestra vida como un camino hacia adelante en línea recta, pero no lo es, es circular. Para poder comprender mejor la definición pensemos en esto.

Si quisiéramos dar una vuelta a la tierra, podemos salir en cualquier dirección siguiendo una línea recta y más allá que atravesaríamos ciudades, ríos, mares y montañas, volveríamos al mismo lugar desde donde salimos. La tierra es esférica. Nuestra percepción nos diría que viajamos en línea recta, pero la realidad es que dimos una vuelta a la circunferencia de la tierra.

De la misma forma se desarrolla nuestra vida, y la astrología lo menciona en los ciclos planetarios por los cuales transitamos.

Ese ciclo circular de la vida como nos habla la astrología, también se puede representar como la máquina de un reloj mecánico, el cual está compuesto por una gran cantidad de engranajes los cuales se mueven a distinta velocidad.

Cada parte coordinada entre sí, girando a distintas velocidades con un único propósito. El movimiento de los engranajes esta predeterminado y esto permite saber, la posición de cada parte del engranaje a cada momento, tanto para el futuro, como para el pasado.

Para citar alguno de los ciclos en la astrología vale mencionar la Luna 28 días, el Sol 365 días, Júpiter 12 años, Saturno 29 años, Plutón 240 años. Todos datos aproximados, pero solo para dar una idea de la relación que tienen.

Si nos imaginamos la máquina del reloj, la Luna es un engranaje bien pequeño, que es el que más rápido gira, mientras que Plutón es el más grande del aparato y se mueve muy lento. Todos estos engranajes van a estar en constante movimiento en forma coordinada. Así funciona nuestro sistema solar, y posiblemente otros sistemas y la galaxia.

Ahora veamos el cuerpo humano. El cuerpo humano está en constante movimiento, así estemos postrados en una reposera tomando sol. Cada célula de nuestro cuerpo vibra a determinada frecuencia, cada órgano vibra a determinada frecuencia, todo en coordinación. Nuestro corazón genera un campo magnético (vibración) que es único, y hasta se puede identificar a una persona por ese campo magnético, ni más ni menos que como con la huella dactilar. Como podemos ver, somos más de lo que podemos ver o sentir.

Nuestro cerebro está en permanente funcionamiento, así estemos despiertos o dormidos, generando ondas que van desde Delta hasta Gama. Estas se pueden medir, más allá que nosotros no nos demos cuenta que varían.

Aunque veamos a las cosas estáticas y sólidas, todo está en constante vibración como lo determinan los principios de la física y mecánica cuántica. La tierra genera lo que se denomina la frecuencia Schumann, y los distintos cuerpos celestes también tiene cada uno su frecuencia en particular. Vale recordar que estos nos estas afectando o interfiriendo con nuestro funcionamiento, más allá que nos demos cuenta o no.

Si queremos entender como funcionamos, debemos cambiar muchas de nuestras creencias que estén basadas simplemente en nuestros cinco sentidos.

Hay mucha más actividad no reconocida e interactuando con nosotros que lo que nuestros cinco sentidos perciben. Toda esta actividad nos puede condicionar y afectar de distintas maneras.

Volviendo al tema de que nos hace feliz, el estado de ‘alegría’ se manifiesta en el cuerpo por un determinado nivel de frecuencia cerebral, la cual está presente en una parte determinada del cerebro, con la consiguiente reacción química en el cuerpo, la cual se activó en el caso que mencionamos, por haber recibido el dinero que queríamos.

Vale decir una influencia externa como haber recibido el dinero que queríamos, generó una secuencia de eventos en el cuerpo, la cual nos hizo sentir de determinada forma.

En realidad, la felicidad, no es más que una reacción química en el cuerpo, que a su vez aumenta nuestro campo energético y todo lo que eso implica.

Para aquel que tenga alguna duda de que esto es así, solo le queda investigar porque la gente consume cocaína, y cuál es el efecto que esta produce en el cuerpo.

En este caso, la cocaína es el elemento externo, que, al entrar en el flujo sanguíneo, desencadena una seria de reacciones en el cerebro y se manifiesta en todo el cuerpo, el cual se percibe como un determinado estado de ánimo.

El problema de la dependencia, se da porque simplemente la modificación del normal funcionamiento del cuerpo por un agente externo, como la droga en este caso, crea una estimulación instantánea difícilmente reemplazable con otra cosa.

Esto solo para aclarar que nuestro estado de ánimo se modifica simplemente por la intervención de un agente externo (el cual podemos procesar con nuestros cinco sentidos o no), el cual interfiere con nuestro funcionamiento mental y físico.

Ahora vamos a entrar en un terreno, donde las definiciones que se plantean, pueda o no choquen con tus creencias.

El universo funciona y evoluciona por la simple razón que existe lo que podemos conocer como ‘equilibrio’. La evolución es natural, siempre y cuando exista el equilibrio.

El equilibrio no se refiere a mantener una balanza con pesas iguales en ambos lados, sino simplemente que las energías que se mueven a cada momento, estén en equilibrio. Que las energías que podemos definir como positivas o negativas, estén en un permanente balance. También las conocemos como el Yin y Yang, luz y oscuridad y tantas otras definiciones que identifican lo mismo.

Si en determinado momento se generó una energía positiva, esta se tendrá que equilibrar con una negativa en orden de mantener el equilibrio. Si algo gana, algo pierde, el resultado final es siempre cero.

Volviendo al tema de la droga, aquel que se mantenga energizado por la droga, está generando una energía ‘positiva’ en su cuerpo, que en algún momento se tendrá que nivelar. Se puede mantener determinado nivel de energía solo al seguir consumiendo, pero cuando falte la droga, llega la compensación energética, la cual se puede representar en depresión, agresión y todos los trastornos asociados a la falta del estímulo externo.

No olvidemos que siempre el balance de cualquier acción será cero, vale decir neutro. Es el equilibrio lo que mantiene todo funcionando.

Estamos hablando de energía, donde cada parte genera la suya, tanto positiva como negativa, y esto se manifiesta tanto con el medio ambiente, las personas, como con los astros celestes.

De la misma forma que podemos ser ‘influenciados’ positivamente al recibir el dinero que queríamos, podemos ser influenciados por la energía de Júpiter que es expansión y el sentir de bienestar; o con hechos que nos apesadumbran, o nos ponen mal, y en este caso, Saturno es el más indicado para influenciarnos de esa forma.

¿Entonces cuál es la clave para vivir bien?

Sin entrar en el tema religioso, todo el mundo conoce la frase, “los siete años de las vacas gordas y los siete años de las vacas flacas”. Esta simple frase lo único que está diciendo, es ‘todo lo que sube, baja’. A los tiempos de abundancia le seguirán los tiempos de escasez. A los tiempos de felicidad, le seguirán los tiempos de tristeza.

Esto puede sonar muy fatalista, pero no es más que una realidad, realidad que uno puede aceptar, o rechazar. Pero más allá de ello, queda demostrado por los hechos y vivencias en la vida de cada uno.

La astrología simplemente indica los ciclos energéticos por los cuales transitamos. Pero, ¿para qué sirven estos ciclos?

Los ciclos tienen como principal propósito el de superarnos como personas, como entidades con conciencia. Los ciclos se repiten en determinados períodos, lo que nos da la posibilidad de recorrer algunos caminos más de una vez. Los ciclos nos dan la oportunidad de remediar y superar cosas que cuando transitamos la primera vez, eran desconocidas para nosotros.

Reconocen el dicho, ¿tropezar más de una vez con la misma piedra? Como vemos no hay nada nuevo bajo el sol.

La carta natal detalla tanto los aspectos potenciales como los restrictivos en nosotros. La evolución simplemente habla de eliminar los ‘condicionantes’ con los cuales nacimos. Todos los aspectos positivos con que contamos son las herramientas a nuestro alcance, para poder trabajar en nuestros condicionantes.

Nada está escrito en piedra.

Si queremos ‘vivir bien’, lo primero que tenemos que hacer, es ser conscientes de nuestras limitaciones, aceptarlas, reconocerlas y trabajar para superarlas. Esto nos llevará a equilibrar las energías que generamos, tanto negativas como positivas, las cuales se activan a través de nuestros pensamientos, palabras y actos.

Es importante el comprender que todo funciona cuando hay balance. El pretender vivir todo momento ‘en alegría, felicidad y bienestar’, es un gran error y si se intenta, luego se pagarán las consecuencias.

Recordemos que, por cada momento de euforia, le sigue un momento de tristeza para equilibrar. Esto lo podemos ver tranquilamente en un partido de futbol, donde en un mismo partido se pasa de la euforia de ir ganando, a la depresión de perder al final. Un partido de futbol dura 90 minutos, nuestro ‘partido’ dura toda la vida.

El equilibrio se logra al trabajar en nuestros sentimientos y las energías que estos generan, disfrutando cada momento de la vida, pero siempre teniendo presente, que cuanto más se disparen las energías del centro de equilibrio, más grandes serán los ajustes que vamos a recibir en el futuro. Todo tiende naturalmente a nivelarse.

La astrología nos ayuda a comprender los ciclos personales que vivimos, y al conocer esto, nos da la posibilidad de navegarlos de la mejor manera posible, teniendo en cuenta que, si bien todo es vibración, hay que lograr estar en estado neutro o equilibrado, pero sin dejar de vibrar. De nada sirve estar en estado neutro pero muerto.

Nuestro comportamiento debería tener como objetivo, vivir en ese centro de equilibrio, que de ninguna manera significa no sentir las cosas, ya que para eso tendríamos que anular nuestros cinco sentidos y desconectarnos del universo, sino que nuestra conciencia es la que tendría que ser la conductora de nuestra vida. Si nuestra conciencia dirigiera nuestra vida en lugar de nuestro ADN astrológico marcado por la carta natal, eso nos alejaría de ser siempre el ganador de nuestras aptitudes y el perdedor de nuestros condicionantes.

Las características natales son simplemente los elementos con los cuales comenzamos nuestra vida, de ninguna manera tienen que ser los mismos con los cuales la finalizamos.

Si al final de nuestra vida terminamos con el estado bruto con el cual nacimos, simplemente esto diría que fuimos por la vida como un barquito de papel a la deriva de la corriente, sin timón y sin capitán, al cual lo podríamos definir, como nuestra conciencia. Que significa la frase, ¡sos un inconsciente! Todo lo expresado en este artículo, es sabiduría milenaria que pareciera se ha dejado de lado en nuestros días.

Tengamos presente que, a partir de cierta edad, es nuestra conciencia la que debería dictar cada acto de nuestra vida. Si así se hiciera, podríamos disfrutar al máximo de nuestra experiencia de vida.

No dejes que nada ni nadie condicione tu vida, si siquiera tu carta natal, pero para eso tendrías que ser consiente de cada uno de tus actos.