Amor, Sexo y la Astrologia (2da parte)
Aviso al lector. El que no quiera saber de como funcionamos ante el amor y el sexo, lo que sucede en nuestro cuerpo y como se representa en nuestra psique lo que sentimos, les recomiendo no seguir leyendo.
Para los que leyeron el libro sobre la Astrología en el Siglo XXI habrán comprendido que el funcionamiento del cuerpo humano es una máquina increíblemente compleja, la cual trabaja en base a reacciones químicas y electricidad. Cada instante de nuestras vidas sucede de acuerdo a las señales captadas por nuestros sensores (vision, olfato, oido, tacto) , procesadas por nuestros sistemas (físicos y lógicos – sistemas nervioso, digestivo, respiratorio, circulatorio, programación intuitiva y personal) y reaccionando de acuerdo a patrones preestablecidos.
Este concepto no es nada nuevo, ya George Gurdjieff lo mencionaba hace 100 años atrás, luego de su largo aprendizaje en las culturas iniciativas en medio oriente y Asia. Es un conocimiento milenario y que principalmente por la influencia religiosa en occidente se ocultó o se dejó de difundir. Algo similar de lo que pasó con la Astrología, que si bien no desapareció, se logro desdibujarla o banalizar sus conocimientos ocultando su poder real.
Regresando al comportamiento del cuerpo humano, de ninguna manera se trata de presentar al ser humano como “una máquina” solamente, sino por el contrario, tomar conciencia que esa máquina de funcionamiento tan complejo, tiene en adición un componente llamémosle “espiritual” que ninguna máquina de inteligencia artificial podrá tener por más avanzada que sea o cantidad de información que posea.
En el artículo anterior decíamos que la Astrología si bien tiene a Venus como el planeta relacionado al amor, en realidad no es tan así. Venus tiene que ver con la belleza, las artes, la estética, el dinero, los dulces y demás placeres de la vida, pero no el amor como lo conocemos o definimos.
Se mencionó muy por arriba los tipos de atracciones bajo las cuales podemos funcionar, las cuales se interpretan por la interacción de las energías planetarias que intervienen en la comparación de las cartas natales.
En el proceso de atracción, primero se produce la “conexión” entre las personas al momento de conocerse. A partir de ahi, se podrán concretar o no los encuentros siguientes que lleven a una relación intima.
Cuando esta relación intima se materializa en el acto sexual, ocurre lo siguiente:
En ambas personas se comienza a producir la Oxitocina, la cual es una hormona que se la conoce como “la hormona de la felicidad”, la cual se genera en la glándula pituitaria ubicada en la cabeza. Esta hormona tiene un papel importante en el sistema nervioso central estimulando la comunicación entre las neuronas del cerebro.
Por investigaciones realizadas en la Universidad de California en San Francisco, se sabe que la generación de Oxitocina está asociada con la habilidad de poder mantener buenas relaciones personales y buenas conexiones a nivel psicológico con los demás.
Cuando la Oxitocina se libera durante el orgasmo, dicho estado activa una unión emocional con la otra persona. Cuanto mas frecuente se haga la liberación de esta hormona, mas cercana se hará la conexión entre las partes. Si lo vemos desde el punto de vista energético, se va creando una nueva energía que involucra a las dos partes.
Esta hormona también se activa durante las contracciones uterinas en el parto (creando la unión entre la madre y el bebé a nacer).
Por estudios realizados se ha comprobado que la hormona conocida como Arginina Vasopresina (AVP) o Argipresina, la cual es producida por el hipotálamo y asociada a los procesos antidiuréticos, tiene que ver con la creación de relaciones monógamas y de larga duración.
La Dra. Helen Fisher ha llegado a la conclusión luego de estudios realizados, que la presencia de Oxitocina y Vasopresina interfieren en el proceso de generación de la Dopamina y Neropinephirina, lo cual explicaría porque crece la unión en la pareja una vez que la pasión disminuye con el tiempo.
Las Endorfinas, que son los calmantes del dolor producidos naturalmente por el cuerpo humano, también cumplen una función importante en las relaciones duraderas. Las Endorfinas generan una sensación de bienestar, tranquilidad, paz y seguridad. Las Endorfinas también se liberan durante el sexo, al igual que con el contacto físico con otra persona, cuando se hacen ejercicios físicos, correr y demás.
Estas hormonas se pueden definir como drogas naturales producidas por el cuerpo humano.
Hay disponible una charla TED de la Dra Fisher donde explica en detalle este funcionamiento .
Después de ver como responde el cuerpo humano ante la relación con los demás y especialmente con la pareja o persona mas cercana, se puede utilizar la Astrología para hacer el paralelismo entre los astros y los procesos energéticos en nuestro organismo y nuestra relación intima con los demás.
La Sinastria nos da el mapa energético de como funcionan las energías básicas entre nuestras máquina psíquicas-físicas, pero ese es solo el punto de partida. A partir de ahí, nuestras acciones y las de la otra parte, activarán los mecanismos correspondientes, y de eso dependerá el camino a seguir.
Se debe tener presente que operamos dentro de ciclos predeterminados y de la misma forma que a la primavera le siguen el verano y al otoño el invierno; nuestras relaciones pasarán por similares ciclos. Tanto la Sinastria, como los tránsitos y progresiones nos pueden ayudar a transitar nuestro camino, comprendiendo los ciclos y nuestra posición en ellos, sabiendo ante todo, que no nos debemos olvidar de las Oxitocina, Vasopresina y Endorfinas que son las que nos ayudaran en nuestros estados de ánimo, ver las cosas de forma positiva y llevar adelante una vida plena.
Continuaremos con la próxima entrega analizando los estudios sobre sexualidad realizados por Masters y Johnson y la relación con la Astrología.